Utilizamos cuero curtido vegetal en la mayoría de nuestros diseños y productos. Existen varios métodos para curtir el cuero, pero no todos son adecuados para la salud ni el medio ambiente.
El curtido vegetal es el método verdaderamente "libre de cromo" y no utiliza productos químicos nocivos. Es un proceso artesanal tradicional que aprovecha los ácidos tánicos presentes de forma natural en algunas especies vegetales, utilizando cortezas, ramas, hojas e incluso algunos frutos en técnicas específicas. El aspecto natural, antes de pintar, presenta un ligero matiz marrón sobre un color beige, con un aroma natural, amaderado y terroso.
El curtido vegetal es quizás el tipo de curtido que produce el cuero más resistente. Este es el tipo de cuero que se utiliza para productos como sillas de montar o fundas. Lo hace un poco menos flexible, por lo que no se utiliza para productos que requieren mucha flexibilidad. Por ejemplo, los zapatos casi nunca se fabrican completamente con cuero curtido vegetal, aunque las suelas resistentes sí lo son. Este tipo de cuero es muy popular en el sector de la tapicería porque se puede comprar como una sola pieza. Otros tipos de cuero, como el curtido al cromo, se encuentran más comúnmente en los laterales, que son solo la mitad de la piel. Debido a su naturaleza resistente, el cuero curtido vegetal es el único tipo de cuero que se puede imprimir con herramientas intrincadas. Esto lo convierte en parte de muchos productos, como polainas o bolsos, que se fabrican principalmente con cuero al cromo, pero tienen incrustaciones labradas.
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